La piel envejece por muchas causas, y una de ellas es el clima, porque los rayos ultravioleta pueden provocar flacidez y arrugas. El sol puede provocar manchas y envejecimiento prematuro, pero la exposición al frío también perjudica la piel porque marca más las arrugas. Varios estudios han descubierto que el tabaco marca las líneas de expresión y la piel del fumador envejece más deprisa.
Otro hábito poco saludable que reseca la piel es el alcohol, porque impide retener el agua y la piel se deshidrata. Los productos azucarados o con un alto índice glucémico también provocan estas líneas de expresión en el rostro, porque el aumento de glucosa provoca la aparición de inflamación, favorece la producción de sebo, facilita la obstrucción de los poros y empeora el acné .
Si queremos mostrar un rostro hidratado, debemos usar cremas hidratantes, seguir una alimentación saludable, utilizar crema solar y limpiar el rostro todos los días. Aunque a partir de los 35 años, es aconsejable utilizar los productos de belleza, pero también optar por los tratamientos estéticos. Para evitar la flacidez facial es importante recurrir a los tratamientos de medicina estética que ayudan a la producción de colágeno y elastina, por lo que mostraremos una piel más hidratada y con menos flacidez. La revista Mujer Hoy explica que los tratamientos de medicina estética no son invasivos y no es necesario pasar por un quirófano.
Gracias a estos beneficios muchas mujeres a partir de los 30 años optan por los tratamientos estéticos para rejuvenecer el rostro y mejorar su aspecto físico. Estos tratamientos son muy demandados porque ofrecen resultados naturales, y permiten recuperar la elasticidad y la tensión facial. Los expertos en este sector apuestan por los hilos tensores por su gran capacidad de hidratación y por ser un estimulador de colágeno.
También podemos recurrir a los hilos tensores para mostrar una piel nutrida. Es uno de los tratamientos más demandados y consiste en estimular los tejidos internos, y elevar las cejas para corregir la flacidez. Los hilos tensores se trata de una técnica de rejuvenecimiento facial que permite elevar las cejas o realizar un efecto lifting de pómulos, del ángulo mandibular y del cuello.
Este tratamiento está indicado para personas a partir de 30 años que presentan una flaccidez leve, pero si tenemos líneas de expresión muy marcadas, debemos optar por otros tratamientos. Este tratamiento no requiere cirugía, por lo que en la intervención no hay cortes ni puntos. El especialista introduce un hilo a través de una cánula guía, dándole a la piel la tensión deseada y eliminando la flacidez.
¿Cuáles son los beneficios?
Los especialistas en medicina estética y en este tratamiento de la clínica experta en trasplante capilar en Sevilla nos explican los beneficios de este tratamiento estético:
–Hilos biocompatibles: los especialistas utilizan hilos tensores que están hechos de un material biodegradable.
–Una sesión: algunos tratamientos estéticos necesitan varias intervenciones para mostrar una piel tersa. Pero este tratamiento se realiza en una única sesión y la duración es aproximadamente de 3 años.
–No es invasivo: es un tratamiento sin cirugía, por lo que el especialista no utiliza el bisturí ni realiza ningún corte. Tampoco requiere ingreso hospitalario y el especialista puede realizar este tratamiento en menos de una hora.
–Piel más nutrida: los hilos tensores pueden corregir la flacidez facial, por lo que es un tratamiento idóneo para tener un rostro más hidratado.
–Mejora la circulación: estimula la circulación de los vasos sanguíneos y elimina los efectos del envejecimiento.
–Efectos inmediatos: los resultados suelen ser bastante inmediatos, ya que al cabo de unos tres meses después ya se puede apreciar una piel más tersa.
¿Los hilos tensores pueden corregir la flacidez de otras partes del cuerpo?
Los hilos tensores también pueden corregir la flacidez de otras partes del cuerpo como glúteos, abdomen, cara interna de los brazos, pechos, etc. Los hilos pueden elevar el pecho y el especialista infiltra los hilos para realizar un mallado circular en el tejido celular subcutáneo, para reposicionar la mama y provocar la síntesis de colágeno. Los resultados se aprecian a partir de la segunda semana y con este tratamiento podemos llegar a ganar hasta una talla más sin aumentar de volumen.
También podemos recurrir a este tratamiento para mejorar la flacidez en la cara interna de brazos. El especialista introduce los hilos a nivel subcutáneo con una aguja-cánula muy fina, pero para conseguir mejores resultados se recomienda completar el tratamiento con mesoterapia. Los resultados duran un año, pero es aconsejable hacer otra sesión a los 4 o 5 meses. Ya sabemos que con los hilos tensores podemos mejorar la flacidez facial y corregir la flacidez de otras partes del cuerpo.



