Ya sean vacaciones cortas, familiares, de verano o de invierno, en este artículo te damos 10 buenas razones por las que unas vacaciones en la montaña son la mejor opción.
Los dos motivos más importantes para un viaje de vacaciones son el deseo de relajarse y el contraste con la vida cotidiana. Ambas necesidades pueden satisfacerse idealmente durante unas vacaciones en la montaña. Esto ya lo sabía el británico Thomas Cook en 1853, quien organizó el primer paquete turístico guiado y abrió así la era del turismo. El viaje llevó a los primeros turistas de Yorkshire a Suiza, concretamente al Valais y al Oberland bernés. Sólo unos 100 años después, alrededor de 1960, surgió la idea de ofrecer este tipo de viaje al Mar (Mediterráneo).
Es por ello que no nos sorprende que hayan tenido que pasar 100 años hasta que se haya encontrado una alternativa de vacaciones a la montaña. ¿Por qué? Puedes descubrirlo en esta lista creada con la ayuda de los expertos del Balcón del Pirineo, de las 10 razones favoritas por las que deberías pasar tu merecido descanso de la vida cotidiana en la montaña:
1) La naturaleza impresionante
En lo más alto de nuestra lista se encuentra, por supuesto, el cautivador paisaje que ofrecen las montañas. Hay picos imponentes, hermosas praderas montañosas, lagos de montaña de aguas cristalinas, una flora y fauna fascinantes y, por supuesto, un mundo animal único. No hay dos montañas iguales y la vistas son los increíbles poderes de la naturaleza. Lo mejor de unas vacaciones en la montaña es, por supuesto, que no es necesario salir para admirar este espectáculo natural. Ofrece una vista maravillosa de la que nunca te cansarás.
Dependiendo de la hora del día, el motivo cambia: por la mañana o por la tarde, las montañas están bañadas por el rojo del sol, durante el día con un cielo azul brillante de fondo o con nubes esponjosas y lanudas. Ni siquiera la niebla y las tormentas restan belleza a las montañas, sino que las resaltan de un modo diferente y atractivo.
2) Descansa con cada respiración
¿Qué necesitas para relajarte? Silencio natural, aire fresco y paz para los ojos y la cabeza. Sin inundaciones de casas, sin ruidos de coches, sin gases de escape. Los habitantes de las ciudades disfrutan especialmente de las vistas panorámicas de las montañas, del aire puro y refrescante y de los innumerables oasis de silencio durante sus vacaciones. Y uno o dos puntos muertos pueden ayudarte a olvidar o dejar tu teléfono móvil y concentrarte en ti mismo nuevamente.
Unas vacaciones en la montaña suponen simplemente un gran contraste con la agitada vida cotidiana y lo puedes sentir con cada fibra de tu cuerpo. Dado que unos pocos días aquí arriba son suficientes para regenerar la cabeza y el cuerpo, las montañas también suelen ser elegidas para unas vacaciones cortas.
3) Vacaciones para toda la familia
Las montañas son amigables para los niños y conectan generaciones. Siempre hay algo nuevo que los niños pueden descubrir. Por fin podrás moverte libremente y sin límites. Correr, gritar, probar cosas: todo es posible. Los adultos no sólo aprovechan su dinero con actividades deportivas como el senderismo, el ciclismo o el esquí, sino que los atractivos culturales que ofrecen muchos centros históricos también tienen un gran potencial de aventura.
Unas vacaciones en la montaña son como una gran aventura que se vive en familia y que os vuelve a unir más.
Por supuesto, tu mascota será el que más disfrute de unas vacaciones en la montaña. El perro podrá correr a sus anchas y explorará territorios nuevos. Si tu gato está acostumbrado a ir con arnés y correa, de seguro disfrutará enormemente también sino, puedes dejarlo en la casa de madera tranquilo mientras estáis de excursión y compartir con el las tardes relajantes junto a la chimenea.
4) Delicias culinarias sensuales
En la montaña hay alimentos que aún tienen un sabor natural, tradicional e intenso. Hay muchas casas rurales que emplean la agricultura biológica y sirven a sus huéspedes abundante comida de cosecha propia. En las montañas, la gente siempre ha sido en gran medida autosuficiente, ya que los viajes a la ciudad o al pueblo eran simplemente largos y difíciles. Esta tradición no se ha perdido en nuestra era moderna. Lo que se pueda cultivar en su puerta será sembrado, nutrido y cosechado en el momento adecuado. Simplemente puedes saborearlo cuando un alimento no tiene que viajar al otro lado del mundo. Pero no sólo es original el cultivo de los alimentos, sino que el arte culinario en la montaña también es incomparable.
5) El mejor gimnasio al aire libre
Cuando piensas en las montañas, piensas en hacer senderismo o natación en verano y esquiar en invierno. Ambos son, por supuesto, una gran evidencia. Existen varias posibilidades y trae consigo un alto factor de diversión. Pero en verano también se puede practicar ciclismo, bicicleta de montaña o nadar en un lago de montaña.
En invierno, la nieve también se puede utilizar para deslizarse en trineo, andar con raquetas de nieve y mucho más. Otros deportes como el yoga, el Pilates o el Tai Chi también adquieren su propia sensación en la verde pradera de la montaña. Variedad, diversión y fitness están garantizados en unas vacaciones en la montaña.
6) Entrenamiento mental incluido
Cualquiera que se atreva a calzarse bien los zapatos y explore la montaña recibirá un entrenamiento mental gratuito como agradecimiento. En la montaña podrás explorar tus propios límites. El recorrido a pie, en bicicleta o en esquí es desafiante en el grado adecuado y te recompensa al final con la sensación de «lo logré». Esto aumenta la confianza en uno mismo. Llegas a conocerte mejor a ti mismo y a sentirte equilibrado. Todas estas experiencias pueden tener un impacto positivo en el regreso a la vida cotidiana.
7) Experimenta el clima de cerca
Mientras que en la ciudad suele hacer un calor sofocante o simplemente un gris apagado, el clima en las montañas es muy variado. La niebla, la lluvia y las tormentas eléctricas a veces pueden aparecer sorprendentemente rápido, pero desaparecen con la misma rapidez. Aquí no hay uniformidad meteorológica. Otro punto a favor: si sales mucho al aire libre, puedes ahorrarte un viaje al solárium tanto en verano como en invierno.
El sol puede brillar fuerte y brillante en cualquier época del año. Al mismo tiempo, las montañas ofrecen protección y oportunidades para refrescarse.
8) Tradición y hospitalidad
La gente de las montañas todavía está llena de tradiciones, especialmente en la agricultura. Subir y bajar por los pastos de montaña se realiza igual que en décadas anteriores. La hospitalidad es más importante que nunca. Los excursionistas cansados en las montañas estarán encantados de que les sirvan un buen refrigerio y en la cabaña se les proporcionará una cama. Las casas todavía se construyen con madera o piedra y con mucho amor. ¿Por qué cambiar algo que ha demostrado su eficacia a lo largo del tiempo? El modo de vida tradicional a menudo da la impresión de que en las montañas el tiempo se detiene, que vivimos como hace 100 años, que aquí no existen el ritmo frenético y el ritmo rápido. Los turistas que vienen a las montañas buscan esta sensación, se contagian fácilmente y se la llevan a casa.
9) Reino animal diverso
El hermoso paisaje montañoso es el hábitat de un mundo animal de cuento de hadas: vacas, cabras, ovejas, caballos, marmotas, cabras montesas, rebecos, ciervos, águilas reales, buitres y muchos más. Siempre te encuentras con animales fascinantes en las montañas. Puedes ahorrar dinero para una visita al zoológico. Con un poco de suerte, no sólo conocerás a los familiares animales de la granja, sino que también podrás maravillarte con las habilidades de escalada de una cabra montesa o la gracia de un águila volando en círculos en la naturaleza.
10) El bien está tan cerca
Unas vacaciones en la montaña suelen estar más cerca que un viaje al mar. Una llegada y una salida breves pueden ser una verdadera ventaja a la hora de elegir unas vacaciones. ¿De qué sirven incluso las mejores vacaciones si se pierde toda relajación en el viaje de regreso?
Por supuesto, hay muchas otras razones por las que deberías pasar tus vacaciones en la montaña y que son buenos argumentos para convencer a tus seres queridos del atractivo de unas vacaciones en la montaña.
